Feng Shui es una poderosa y sencilla herramienta para crecer y evolucionar, para desafiar nuestros límites y encontrar oportunidades. A pesar de lo que nos hayan podido hacer creer, nada tiene que ver son superstición o algo meramente comercial. El Feng Shui es sentir, es ver más allá de lo tangible y comprender más allá de las creencias.
El entorno tiene un efecto sobre las personas, nos sentimos de forma diferente en cada espacio y reaccionamos ante la combinación de los colores, de las proporciones y de los materiales. Esto tiene que ver con la energía vital que llamamos Chi y que no sólo está presente en los seres vivos, también en los espacios que habitamos. Feng Shui es reconocer este flujo de Chi y redirigirlo de forma consciente para lograr un mayor bienestar, lo que se traduce en una mejora en la salud, estado de ánimo, vitalidad, claridad mental…etc.
El entorno influye en como percibimos las cosas, nuestra visión del mundo y proyectos de futuro.
Observar nuestra casa con ojos feng shui nos lleva a una toma de conciencia de que no es un elemento neutro, sino que nos influye en todos los aspectos: físico, emocional y espiritual.
A través de nuestras casas descubrimos lo que necesitamos aprender o conseguir trascender, podríamos decir que es la terapia a través del espacio.
Modificar nuestro entorno conlleva un cambio en nuestro comportamiento, estado de ánimo y energético…el Feng Shui nos enseña a hacer estos cambios de forma consciente para el logro de objetivos concretos, dicho de otro modo, el Feng Shui sería la manera de lograr los objetivos, haciendo de tu espacio, un reflejo de tu estado deseado.
Uno de los principios fundamentales del Feng Shui es que todo cambia. A lo largo de la vida, cambiamos y evolucionamos…en estos cambios nuestros espacios juegan un papel fundamental. Nuestras casas pueden ser un ancla en el pasado o un trampolín hacia el futuro.
He podido experimentar en mi misma y en muchos de mis clientes que los espacios en los que vivimos pueden ser el detonante que activa el cambio en nuestras vidas.
¿Esto es magia?, el Feng Shui no tiene nada de magia, es técnica y conocimiento llevados a la práctica, basados en la ley física de acción-reacción, con unos resultados que sí son realmente mágicos…y muy rápidos!
Por este motivo, realizar un estudio de Feng Shui de nuestras viviendas y lugares de trabajo, se convierte en algo fundamental para lograr un total bienestar. Además no es algo que se realice una sola vez, es necesario realizar revisiones periódicas, ya que nuestro espacio está vivo, en constante cambio y en relación con nosotros.
Feng Shui es algo más que espacios armoniosos, es una filosofía de vida y una guía en nuestro caminar.